La menstruación es un proceso natural; sin embargo, si no se gestiona adecuadamente puede provocar problemas en la salud. Los informes han identificado vínculos entre las prácticas de higiene menstrual deficiente y los siguientes efectos en la salud de mujeres y niñas: Sarpullidos e irritaciones, Infecciones urinarias, vaginales y perineales, Complicaciones con la reproducción y el embarazo, Complicaciones asociadas con la mutilación o corte de los genitales femeninos
Es importante que exista el acceso a productos que permitan manejar los efectos o síntomas que llegan con la menstruación, así como también a la prevención de otras afecciones.
En primer lugar, la menstruación puede causar molestias físicas como dolor abdominal, dolores de cabeza, fatiga y cambios de humor. Estos síntomas son comunes y pueden ser tratados con analgésicos, pero en algunos casos pueden ser más graves y requerir atención médica.
Además, la menstruación también puede aumentar el riesgo de infecciones y enfermedades. Durante el período menstrual, el flujo sanguíneo aumenta en el área vaginal, lo que puede crear un ambiente propicio para el crecimiento de bacterias y otros microorganismos. Las mujeres que no tienen acceso a productos sanitarios adecuados como toallas sanitarias o tampones pueden estar en mayor riesgo de infecciones.
Por otro lado, las mujeres que experimentan períodos irregulares o muy dolorosos pueden tener una condición médica subyacente como endometriosis o síndrome de ovario poliquístico. Estas condiciones pueden afectar la fertilidad y la salud reproductiva a largo plazo.
Es importante que las mujeres estén informadas sobre su ciclo menstrual y sepan cómo manejarlo de manera segura y saludable. Esto incluye el uso de productos sanitarios adecuados y la adopción de hábitos higiénicos como lavarse las manos antes y después del cambio de toallas sanitarias o tampones.
Además, es importante que las mujeres se sometan a exámenes regulares de salud para detectar cualquier problema médico subyacente. Los profesionales de la salud pueden proporcionar tratamientos y recomendaciones para ayudar a las mujeres a manejar los síntomas menstruales y mantener una buena salud reproductiva.
La falta de acceso a recursos adecuados para mantener una buena higiene menstrual puede llevar a una serie de problemas de salud, que van desde infecciones hasta enfermedades más graves.
Uno de los problemas más comunes asociados con la mala higiene menstrual es la infección vaginal. Cuando las mujeres no cambian sus productos sanitarios con regularidad o no los usan correctamente, pueden acumularse bacterias y otros microorganismos en la zona genital, lo que aumenta el riesgo de infección. Estas infecciones pueden ser dolorosas e incómodas, y si no se tratan adecuadamente, pueden llevar a complicaciones más graves.
Otro problema de salud relacionado con la mala higiene menstrual es el síndrome de shock tóxico (SST). Esta es una enfermedad rara pero grave que puede ocurrir cuando las mujeres usan tampones durante períodos prolongados de tiempo. El SST puede ser potencialmente mortal y se caracteriza por síntomas como fiebre alta, náuseas y vómitos, y erupción cutánea. Es importante que las mujeres estén al tanto de los riesgos asociados con el uso de tampones y cambien sus productos sanitarios con regularidad para evitar el SST.
Además de estos problemas de salud, la mala higiene menstrual también puede tener un impacto en la salud reproductiva de las mujeres. Las infecciones vaginales crónicas pueden dañar el tejido vaginal y aumentar el riesgo de infertilidad. Además, la falta de acceso a productos sanitarios adecuados puede llevar a la reutilización de productos, lo que aumenta el riesgo de infección y puede dañar el tejido vaginal.
En conclusión, la higiene menstrual es un aspecto importante de la salud de las mujeres que a menudo se pasa por alto. La falta de acceso a recursos adecuados para mantener una buena higiene menstrual puede tener un impacto significativo en la salud de las mujeres, desde infecciones hasta enfermedades más graves. Es importante que se promueva el acceso a productos sanitarios de calidad y se eduque sobre su uso correcto para mejorar la calidad de vida de las mujeres y prevenir problemas de salud. Como sociedad, debemos trabajar juntos para garantizar que todas las mujeres tengan acceso a los recursos necesarios para mantener una buena higiene menstrual y proteger su salud.
Fuente: CAWST,(2013).Guía de Salud e Higiene Menstrual. Disponible en: https://www.cawst.org/services?gclid=CjwKCAjwkLCkBhA9EiwAka9QRjkCMMpwAMJ9TJSqK5g9SLmcTuqL__9-j9drhEpkjDd14z7d9QAT7xoCOXMQAvD_BwE